Esta semana se publicó en La Nación la historia que me contó Marcos Neves, quien posee desde hace 30 años la pelota Etrusco con que Maradona realizó su última hazaña en los mundiales, sirviéndole un pase gol a Claudio Caniggia en el 1 a 0 ante Brasil en Italia 90. El colega brasileño cuenta cómo se hizo de la pelota y cómo la conserva hasta hoy. Y claro, habla sobre su admiración por Maradona. Acá el artículo que fue a la contratapa del suplemento deportivo.
Alejandro Panfil
Comments